En esta noche tan especial que se repartía alegría y felicidad en forma de regalos materiales, nosotros quisimos aprovechar para recordar que también podemos regalar valores para sacar de cada uno lo más bonito que traemos dentro y contribuir con nuestro pequeño grano de arena a hacer un mundo mejor, más justo y solidario porque todos tenemos un pequeño Rey y una pequeña Reina dentro del corazón.
También hablaba de amor, solidaridad, alegría, pureza… Por este motivo todos los acompañante de los Reyes compartían parte de su nobleza y regalaban cosas inmateriales, valores que los niños y niñas puedan adaptar a su lenguaje: alegría para compartir y encomendar sonrisas y felicidad, justicia para ser solidarios con todo el mundo y aprender a compartir, sabiduría para tener más paciencia… Para hacerlo más participativo y hacer que a todos los niños y niñas del Distrito los quedara un recuerdo del que vieron y sintieron, les regalamos unos bonitos papeles de colores con partituras de canciones que hacían referencia a diferentes valores positivos.